Esta tarde salí al balcón, lo
tenía olvidado. El perejil y el tomillo resisten a mi falta de atención y al
olvido del agua. Hasta mi balcón se volvió poco confiable, son varias las veces
que uno lee sobre el destino de balas perdidas, que encuentran alguien que quiso ver más allá de
su cuadricula habitacional. Esta mañana, no oí a las guacamayas pasar en
dirección al este, creo que también andan confundidas. Entre los gases
lacrimógenos y el ruido de los aviones que vuelan haciendo pruebas para la
conmemoración del 5 de marzo, están como todos, a la expectativa. Se agudizan
los sentidos, cualquier ruido se vuelve extraño, y uno desconfía. La calle se
activa con marchas de todos los colores e ideologías. A todos nos mueve la
misma sensación de miedo indivisible, pero que toma distintas formas, como el
agua, según qué la contenga. Los miedos son libres y es difícil someterlos. Las
carencias, la educación y el estrato social del que procedan, los condicionan.
La vida entonces, se vuelve frágil, casi volátil. En la mañana se salió a la
calle con ella y en la noche, había desaparecido. Las mismas palabras huecas,
los eufemismos que las envuelven y las
camuflan. Porque las palabras se vuelven armas, y no precisamente cargadas de
futuro. La violencia aflora, la verbal, la física. Emerge junto con el miedo,
lo peor del ser humano, lo oscuro, lo sublimado. El desconocimiento del otro,
como persona con derechos, se vuelve ajeno, extraño, habitante de otra tierra
lejana y enemiga. Mientras tanto, la ciudad se va apagando, recogiendo en sí
misma, buscando su postura fetal que la proteja de males por venir. Los
comercios por falta de mercancías de todo tipo, bajan las santamarías,
acortando horarios, haciendo inventarios que alarguen el tiempo de colgar el
cierre indefinido. Los colegios reciben algunos niños soñolientos, las maestras
dicen que ellas están ahí, pero que es difícil garantizar nada. Los niños no
entienden mucho, sólo lo viven y guardan en su memoria. Los viejos se repliegan
buscando su concha. La ciudad pasa de su noche oscura
y solitaria por el miedo, al estruendo de los cacerolazos y las hogueras
prendidas.
Fotografía de Machal Batory, tomada de la red
Mucho ánimo amiga.
ResponderEliminarNunca una noche venció a un amanecer
Un besote
Ojalá duren poco los problemas y no lleguen a más.
ResponderEliminarUna crónica de la situación impecable, estimada María. Desde mi rincón del mundo te mando un fuerte abrazo que cobije todos tus miedos y toda la angustia e incertidumbre que has sabido plasmar en este texto colmado de detalles cotidianos y sensibilidad.
ResponderEliminarUn beso.
Fer
Hola Maria:
ResponderEliminarYo también me agobio, aún sin estar en Caracas, aunque una parte importante de mi si lo está allá.
Dios quiera esto se solucione y entremos en razón por el bien de todos nosotros
Besote
Mi capacidad de análisis se atrofia ante semejante barbarie en algunos rincones del mundo-.
ResponderEliminar¡bien sabes cuánto entiendo esta sinrazón!
Estoy contigo , un abrazo
Al final los problemas se desgastan.
ResponderEliminarFuerza y agarrarse de lo que mas cerca hay, por que el viento en algún momento se detendrá.
ResponderEliminarSaludos
Las cosas van mal en muchos sitios. España es una siembra interminable de parados, gente sin futuro y corruptos por todos los rincones. Y si pensamos en otros países que carecen de los más elemental tenemos hasta que dejar de quejarnos.
ResponderEliminarPero, logicamente, no lo hacemos porque vemos que las cosas no van como quisiéramos.
Si Venezuela no produjera petróleo te aseguro que a nadie le importaríais.
Un abrazo, María.
Todo mi apoyo moral si algo te reconforta, ante tanto agravio físico y psíquico,que algunos deben soportar.
ResponderEliminarUn saludo
elperroverde
Querida Coco,
ResponderEliminarInevitable el dolor que siento, con las lágrimas correr por mis mejillas, viendo como el país que me vio nacer se despedaza al correr los días...!
Mucha profundidad en tus letras..., sentí un cúmulo de sentimientos encontrados, pues recuerdos vienen a mí, pensando en que por años vi, cual balcón comentas en aquellos instantes donde las guacamayas nos alegraban el día dejando un destello de colorido y un sonido inigual.
Esperemos tiempos mejores.
Un abrazo! Teté Balboa
Después de la negra noche, sin remedio tiene que amanecer, es necesario y justo que sea así.
ResponderEliminarTransmites la tremenda angustia que se vive.
Mi apoyo junto con un abrazo.
Un abrazo solidario !!!
ResponderEliminarCariños
Ciertamente, a los caraqueños el miedo nos va volviendo una suerte de prisioneros. A la ciudad, ya tomada por la violencia desde hace tiempo, hay que agregarle ahora la represión de las fuerzas militares y paramilitares. Lo describes de una manera extraordinaria, desde la intimidad de lo cotidiano. Un abrazo.
ResponderEliminarHola, María.
ResponderEliminarLas cosas tienen que mejorar y nunca la oscuridad debe vencer a la luz. Ese es mi deseo.
Un abrazo.
Gracias por tu comentario en mi blog Tijerasdepapel. He leído algunas entradas del tuyo y me encanta cómo escribes. Me quedo como seguidor tuyo. Un abrazo
ResponderEliminarEs una pena la situación de este país, y que como pasa en otros sitios todo es por la maldita ansia de poder, aparte que este sñor no parece que esté muy bien de la cabeza.
ResponderEliminarMi hija estuvo hace dos años, por la región de Táchira, con una ONG, que acoge niños desarraigados. Tiene amigos allí y siente mucho esta desgraciada situación.
Esperemos que esto cambie pronto.
Abrazos
Con cariño te deseo buenisimos momentos en el fin de semana!!!!
ResponderEliminarTu bella prosa dibuja un escenario desgarrador, sin lugar a dudas. Ojalá llegue muy pronto el día en que nos la puedas vestir de alegres colores. Un fuerte abrazo amiga.
ResponderEliminarDurísima situación similar a la que estamos sufriendo en España. Degradación social, miedo, comentarios en voz baja para que el compañero no sepa lo que se cuenta al amigo, pequeños empresarios abocados a situaciones desesperantes y, en lo más alto de la pirámide, sentados en sus relucientes poltronas propiedad de todos, se encuentran los dirigentes aferrados a unos pocos votos que se les marcharán si no establecen cauces populistas. Populistas pero no eficaces, derrochadores de los pocos fondos que recaudan con sus elevados impuestos, repartidos por igual entre sus sueldos y sus festejos. María, es el momento de gritar con Mafalda: "¡Que se detenga el mundo que me bajo...!
ResponderEliminarUnm cariñoso abrazo, querida amiga María.,
Esther, Floren, M.Paz, Manu, Beatriz, Jordim,Forbiddem,Ohma,Pedro,Teté,San, Abuela Ciber, Bea, Towanda, Antorelo,Pamisola, eRRe, Antonio, muchas gracias amigos, por el cariño y el apoyo que he sentido en estos días.
ResponderEliminarUn gran abrazo desde Caracas
MI PUNTO DE VISTA DE LOS QUE MANDAN EN VENEZUELA: Hay dios mío como está el mundo. Recuerdo cuando era pequeño aquí en España Maria, uno de los países que se hablaba aquí en España y hablando de sudámerica me refiero, estaba Cuba o Mexico, Argentina, Venezuela y Bolivia, estos eran los países que se hablaba como destino a los que sé podría ir a buscarse la vida, entre Cuba Argentina eran los más nombrados y un poco Bolivia, pero Venezuela era uno de los países que a mi personalmente siempre me había gustado ir a conocer. Estaba en la boca de mucha gente para irse a trabajar a Venezuela a Bolivia, pero amiga mía, entre la inseguridad del país por la delincuencia de traficantes, secuestros o atracos. Por las apropiaciones del gobierno contra las empresas extranjeras, haciéndose caso el señor Chavez e involucrándose en la expropiaciones de de las empresas extranjeras como la presidenta de Argentina la tal Cristina Fernández de Kirchner, y como el presidente de Bolivia Evo Morales y evitando que otras empresas pudiesen ir a Venezuela a invertir, por culpa de todos estos. Que si historias con la revolución con el señor castro y juntándose con ellos en ves de ir a quien les de de comer al país con todo el mundo extranjeros, con Europa, Estados unidos ect, sin dejar por supuesto a nadie de sudámerica fuera eh no es eso, y no a quien le quite, por solo quedar él como un amigo revolucionario. Venezuela tiene petroleo dios mio, es un gran país que podría estar vendiendo el petroleo a Europa y otras partes del mundo, y no estar vendiéndolo o casi regalando, solo a los cuatro países latinos, si así fuese. Y por ultimo, lo que tenia que hacer los ciudadanos de Venezuela es echar a estos presidentes que, cuando la oposición dice algo que a ellos no les gusta, sacan o les echan los militares, que cuando dice alguien que vive allí y aunque no sea de allí pero paga sus impuesto como los de allí y por lo tanto tiene los mismo derechos, y si se quejan, manda a los militares y les hacen la vida imposible o les expropian el local, y eso son actos de pura mafia por no decir abuso del gobierno. Mientras tengáis a estos impresentables en el país mandando, no vamos bien.Venezuela necesita que inviertan allí grandes empresas, que se les apoye, que esas empresas vayan creciendo y dando puestos de trabajo y vayan abriendo más empresas y invitando a los amigos de ellos a abrir negocios, que es lo que interesa a Venezuela, que tenga un presidente con los que le rodean, que cuando den una rueda de prensa se presenten periodistas de todo el mundo por que Venezuela interese, y no que salgan a decir tontadas de lo que dicen que dijo el señor hobama y al final lo que quieren es que estén de enfrentamientos con estados unidos porque a los que mandan hoy en el país no les interesa que haya democracia, que se cumpla como tal y los más importante, su libertad con libertad de expresión para todos y cada uno de los Venezolanos.no tengo absolutamente nada con Venezuela me encanta Venezuela pero no como se está llevando el país, es un punto de vista mio y como vosotros podéis opinar de España, que también se las trae en algunos aspectos vocerangas jjajjaj...besazos y un abrazo...
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